En esta nota te ayudamos a entender la importancia de consultar al veterinario y cómo interpretar las etiquetas de los alimentos para tomar decisiones más informadas.
Consulta al veterinario: la clave del éxito
Cada perro es único. Factores como la raza, el tamaño, la edad y la salud general influyen en el tipo de alimento que necesita. Por ejemplo:
- Razas pequeñas: requieren alimentos con más calorías por porción debido a su metabolismo rápido.
- Razas grandes: necesitan alimentos que promuevan la salud articular.
- Perros con condiciones específicas: como alergias o problemas renales requieren dietas especializadas.
El veterinario es quien mejor conoce las necesidades de tu perro y puede recomendarte alimentos balanceados adaptados a sus características individuales.
Cómo leer las etiquetas de los alimentos para perros
Saber interpretar las etiquetas de los envases es fundamental para garantizar que estás comprando un producto de calidad. Aquí te explicamos los aspectos más importantes:
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Lista de ingredientes
- Los ingredientes suelen estar enumerados en orden descendente de peso, lo que ayuda a conocer la cantidad y el tipo de ingredientes. Es importante evaluar la calidad de los ingredientes, priorizando los que contengan proteínas de alta calidad, aminoácidos esenciales y ácidos grasos omega.
- Proteínas animales: El primer ingrediente debería ser carne, pollo, pescado o algún derivado de calidad, ya que los perros son carnívoros por naturaleza.
- Evita subproductos vagos: Como “subproductos de carne” o “harinas de origen desconocido”. Prefiere marcas que detallen claramente el tipo de proteína.
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Grasas saludables
- Busca ingredientes como aceite de pescado o grasa de pollo. Estas grasas son esenciales para mantener un pelaje brillante y una piel sana.
- Evita productos con grasas saturadas de baja calidad. Lee cuidadosamente la etiqueta. Si los ingredientes incluyen términos vagos como grasa animal o grasas hidrogenadas, opta por una marca que especifique claramente la fuente y calidad de las grasas.
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Carbohidratos y fibras
- Ingredientes como arroz integral, avena o batata son excelentes fuentes de energía.
- Limita alimentos con maíz, trigo o soya en grandes proporciones, ya que son menos digestibles para algunos perros.
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Vitaminas y minerales
- Busca la inclusión de antioxidantes como la vitamina E y C, esenciales para el sistema inmune.
- El calcio y el fósforo son vitales para huesos y dientes fuertes, especialmente en cachorros y razas grandes.
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Declaración de calidad
Elige alimentos que cumplan con los estándares de organizaciones como SENASA o su equivalente en tu país.
¿Qué ingredientes evitar?
Ten cuidado con alimentos que incluyan:
- Conservadores artificiales como BHA o BHT.
- Colorantes sintéticos que solo mejoran el aspecto, pero no aportan nutrición.
- Altos niveles de sal o azúcar añadida.
- Sal (Sodio): Los alimentos balanceados para perros suelen contener entre 0.3% y 1% de sodio en base al peso del alimento seco. Un nivel superior a 1.5% de sodio puede considerarse alto y puede ser perjudicial, especialmente para perros con problemas renales, cardíacos o de hipertensión. Busca términos como cloruro de sodio o sal. Si aparece entre los primeros ingredientes, el contenido podría ser alto.
- Azúcar: En general, los perros no necesitan azúcar añadido en su dieta. Algunos alimentos pueden contener trazas de azúcares naturales provenientes de ingredientes como frutas, pero evita productos con azúcar, jarabe de maíz, dextrosa, glucosa, fructosa o sacarosa añadida.
La importancia del cambio gradual
Si decides cambiar el alimento de tu perro, hazlo gradualmente. Mezcla el alimento nuevo con el anterior durante 7-10 días para evitar problemas digestivos.